Para los que no
han leído el libro y no tienen en sus planes leerlo, les revelo el pasado de
esta casa, que está ubicada en Hogsmade.
La casa de los
gritos es un lugar al que muchos le temen, pocos se atreven siquiera a
acercarse porque han oído ruidos extraños provenientes de aquel
lugar. Unos de los pocos que se han atrevido a intentar entrar es George y Fred Weasley,
pero no pudieron, pues las ventanas y puertas estaban cerradas.
En el tercer
libro (Harry Potter y el prisionero de Azkaban) cuenta Lupin que cuando era
joven y se convertía en lobo iba hacia aquel lugar, a ocultarse para no
lastimar a nadie. Esa fue idea de Dumbledore para que Lupin pudiera seguir
estudiando en Hogwarts.
Para que no cualquiera pudiera entrar hacia aquel lugar
plantaron al sauce boxeador en la entrada del pasadizo que dirige hacia la casa.
Finalmente
cuenta que sus amigos James Potter (Cornamenta) Sirius Black (Canuto) Petter
Petter Pettigrew (Colagusano) se convirtieron en animagos (bruja o mago con la
capacidad de transformarse en un animal, conservando el pensamiento humano y la
capacidad de razonar) para poder ir a ver a su amigo Lupin (Lunático). De
esta forma Lupin no les podía hacer mayor daño. Ninguno de los tres compañeros aparecía registardo como animago, porque de jóvenes encontraron la forma de como hacerlo sin necesidad de mantener ese registro.
Luego los magos
y fantasmas no volvieron a acercarse al lugar por la mala fama que había
ganado. Los gritos y billucios que se solían escuchar provenían de Lupin, ya convertido en lobo.
Guatemala 22 de julio de 2012
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